Desde la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE) solicitaron a las autoridades provinciales la necesidad de una permanente inspección y control en el ámbito rural, sobre todo en la cosecha de yerba mate.
Mediante notas elevadas al gobernador Maurice Closs y la ministra de Trabajo, Claudia Gauto, el subdelegado regional de UATRE, Carmelo Rojas, reiteró el pedido de fiscalización por parte del Estado para combatir el trabajo en negro, el pago por debajo de los convenios, el traslado en forma riesgosa de los trabajadores y el trabajo infantil, entre otros males que afectan a los peones rurales de la provincia. En tanto, detalló que en el pedido elevado a las autoridades provinciales, el gremio informó del promedio de rendimiento de un trabajador con el objetivo de facilitar el control del trabajo en negro e infantil.
Al respecto, explicó que “si un proveedor entrega 20 mil kilos de hoja verde por jornada y declara sólo seis u ocho tareferos, con seguridad ocupó mano de obra infantil, porque es imposible que un trabajador haga 2.500 ó 3 mil kilos por día”, comentó Rojas. Según el gremialista, un tarefero puede cosechar entre 350 y 500 kilos por día, dependiendo del tipo de corte y el estado del yerbal.
